De repente te da por volverme a buscar, por hablar de los dos y salir a cenar.
Tal parece que yo te hice falta de más, que no fuiste feliz con tu otra mitad.
De repente te da por volver a sentir quien es la que en verdad sabe hacerte  feliz.
Pero se te olvidó que al marcharte de aquí yo quedé igual que tu: LIBRE PARA ELEGIR.

No hay comentarios:

Publicar un comentario